El Maigmó (1296 metros), es una sierra que separa el valle del Vinalopó de la Hoya de Castalla. Su perfil característico la hace inconfundible a la vista desde otras sierras cercanas. Su umbría alberga una importante masa forestal de pino cruzada por numerosas pistas y senderos y en la que quedan los restos de tres pozos neveros.
Los pozos neveros son solo la excusa para hacer un amplio recorrido por la umbría y cordal del Maigmó. En realidad, todos se pueden visitar con poco esfuerzo e incluso se puede llegar con el coche cerca de ellos.
La ruta comienza en el inicio de la pista que sube al Balcón de Alicante, justo antes de las ruinas de la casa de Ragil del Pi. Podemos dejar el coche en los márgenes del camino. Vamos a seguir parte de la ruta de otros senderos, así que veremos señalización de los PR-CV 31, 84 y 85.
Seguimos la pista del Balcón de Alicante hasta el primer grupo de casas y nos desviamos por la derecha. Cruzamos el barranco y pasamos junto a las ruinas de la casa de Ragil del Pi. Tras la casa hay dos caminos. Podemos subir por ambos caminos al mismo sitio, porque se unen más adelante, pero yo prefiero el de la derecha. Se trata de una estrecha pista entre el bosque de pino que acaba haciendo un zig-zag para unirse al camino que dije antes, y juntos salir a una pista. Continuamos por la derecha y llegamos al pozo nevero de Planisses.
Desde el pozo de Planisses, seguimos por la pista principal y pasamos por las casas de Planisses. Desde aquí hay varias opciones para subir al Carrascalet, pero la más evidente es seguir por la pista principal (camino de les Planisses). Pasamos junto a un aljibe, el siguiente cruce seguimos recto y en el segundo cruce localizamos los postes del PR-CV 85, que indican la subida al pozo del Carrascalet por la izquierda. Subimos por la pista, en el siguiente cruce de nuevo a la izquierda y llegamos al pozo del Carrascalet. Junto a éste también se conservan los restos de una casa cueva.
Desde el Carrascalet vamos a seguir todo el cordal del Maigmó hasta la cima. Para ello podemos seguir la pista principal que discurre cerca del cordal o tomar los atajos como el que se desvía para pasar por el Alt de Guisop. Vemos postes del PR-CV 31 y llegamos a las antenas del Alt de les Xemeneies. Continuamos por la senda del cordal, pasamos junto al Maigmonet y bajamos al collado de l'Eixau. Desde el collado se vuelve a subir por sendero por la cara oeste del Maigmó hasta el paso del cable, ahora con elementos artificiales (asas y cadenas) que facilitan la subida. Tras el paso hay otras cadenas, alguna cuerda e hitos que ayudan a seguir la ruta a la cima. El Maigmó es el punto más alto de la ruta, 1296 metros.
Para los senderistas que no trepen, el paso del cable puede suponer un obstáculo serio. Como alternativa, se puede bajar del collado de l'Eixau por la pista hasta el camino del Balcón de Alicante, y de allí al pozo nevero del Maigmó, donde se puede continuar con esta ruta tal como describo más adelante.
Desde la cima del Maigmó bajamos por la senda que conduce al Balcón de Alicante, y desde allí seguimos por el PR-CV 84 (es el camino que baja tras el aparcamiento por la izquierda). Nos encontramos un primer cruce a unos 400 metros del Balcón, y seguimos por el sendero de la izquierda (solo hay un hito de piedras). En el segundo cruce, en una curva a la derecha, podemos dejar un momento la ruta principal y acercarnos al pozo nevero del Maigmó. Hay que seguir la estrecha senda de la izquierda y pasar la parte superior de una zona roturada. El tramo es un poco perdedor, pero el pozo nevero está bastante cerca y se encuentra con facilidad.
De regreso a la senda del PR-CV 84 bajamos a una pista. Continuamos por la derecha y en la siguiente curva, bajamos por la izquierda, por una senda bastante erosionada que nos conduce al camino de Ragil, donde veremos un par de postes del PR-CV 84. Seguimos la pista por la derecha, junto al barranco Salat. Para volver al coche podríamos bajar hasta la pista asfaltada y regresar por ella al camino del Balcón de Alicante, pero hay otra opción. Unos 300 metros antes del asfalto, vemos un hito a la izquierda en una pequeña explanada por la que podemos acercarnos al barranco y cruzarlo. Al otro lado hay que localizar una pista de tierra y, tras pasar junto a una ruina, salimos a la altura de la casa de Ragil del Pi. Solo queda regresar al coche por el camino del Balcón de Alicante.