El parque natural de las sierras de Cazorla, Segura y las Villas, reserva de la Biosfera, es el mayor espacio protegido de España. Estas sierras forman parte del Sistema Prebético, y su máxima elevación es el pico Empanadas (2.127 metros).
La ruta comienza en la Nava de San Pedro, a donde llegamos por pista desde Vadillo Castril, pasando por el collado Verde y la fuente de la Garganta. Dejamos el coche en un ensanche de la pista junto al primer cortijo que nos encontramos, un restaurante y casa rural.
Desde la Nava de San Pedro, continuamos por la pista que señala la senda de Pescadores. A 500 metros seguimos por la pista de la derecha, y a un kilómetro y medio localizamos la senda de Pescadores, que se aparta de la pista por la derecha. Bajamos por el camino, que pasa junto a un gran quejigo, deja a la izquierda un cortijo y finalmente llega al Vado de las Carretas, donde hay un poste del GR-247. Debemos cruzar el río Guadalentín, o bien directamente por el vado, o bien por una pasarela que hay cerca, aguas arriba. Continuamos por el camino unos 700 metros, y nos desviamos por la izquierda para pasar por el cortijo de los Poyos de Tribaldo, en ruinas. Hay una fuente y una pequeña caseta cerrada.
Desde el cortijo, debemos localizar un hito que queda en dirección sur, subiendo hacia los paredones del Tranco del Lobo. Una vez localizado el primer hito, la senda es más fácil de seguir. La senda sube poco a poco hasta una pista que hay en la parte alta del Tranco de la Marcolla. Una vez en la pista, hay que prestar atención a un desvío por la izquierda, para pasar por unas antenas y seguir por la pista que se dirige hacia el Tranco del Lobo. Si no se localiza el desvío se puede seguir por la pista hasta el siguiente cruce y torcer a la izquierda, para subir por la pista pasando junto a las antenas. Se da un poco más de vuelta, pero se va al mismo sitio. Ambas opciones las tenéis en el track.
Desde las antenas, vamos a seguir por una pista que discurre por la cañada de la Peguera en dirección al Tranco del Lobo. Pasamos por una verja y llegamos a un cruce. Continuamos por la izquierda, y después volveremos por el otro lado. Por el nuevo carril continuamos hasta un desvío por senda a la derecha que nos conduce al mirador del Tranco del Lobo. En esta zona hay un panel con la historia de la captura de "el Ramiro", el último maqui de la sierra. Desde el mirador seguimos por la derecha (dirección este), en subida, sin seguir una traza evidente, aunque hay algunos hitos, hasta el punto más alto, el pico del Tranco del Lobo (1761 metros).
Todavía nos queda pasar por una de las zonas más llamativas del Tranco del Lobo. Bajamos del pico en dirección este, pasamos otro alto y localizamos una bajada hacia la espectacular cornisa del Tranco del Lobo. La cornisa es ancha y cómoda para caminar, pero el precipicio de la izquierda le dan mucho ambiente. Tras rodear por la cornisa salimos bajo un arco natural.
Tras el arco, la senda continúa unos 300 metros más por la cara norte de la sierra hasta salir a un collado y girar a la derecha. Caminamos ahora por una zona marcada solo con hitos, de senda difusa, y que plantea en ocasiones problemas de orientación. Más adelante, la senda se hace más evidente y acaba saliendo a una pista por la que volvemos al cruce por el que habíamos pasado antes. El resto de la ruta es volver por el mismo camino por el que vinimos.