El actual pueblo de Riópar debe su nacimiento a las Reales Fábricas de San Juan de Alcaraz, creadas en 1772 por Hans Georg Graubner, para la obtención de latón y calamina. El "Riópar Viejo" conserva la iglesia del Espíritu Santo (s. XV), y las murallas árabes del antiguo castillo. El cordal de la Almenara, al norte de Riópar, separa el valle del río Mundo de las grandes llanuras de La Mancha. Su máxima elevación el es alto de la Almenara, de 1976 metros.
Podemos comenzar la ruta desde Riópar, pero aquellos que quieran evitar la primera parte del recorrido por pista, también pueden comenzar en la fuente Grande.
Desde Riópar, giramos a la derecha en el mesón "Los Arcos" y, al final de la calle, giramos a la izquierda. Seguimos la carretera que pasa por el Gollizo y después, convertida en pista de tierra, gira al oeste para dirigirse hacia Riópar Viejo. Pasamos junto a una cantera, que dejamos a la izquierda, y un kilómetro y medio más adelante, por una pista a mano derecha, está la Fuente Grande, apenas a 200 metros de la pista principal.
Volvemos a la pista principal y continuamos medio kilómetro hasta una vaguada por la que sube un sendero, que seguimos. El sendero asciende entre pinos para salir a una planicie por la que pasa la carretera AB-415, a la que salimos antes del punto kilométrico 191. Continuamos la subida por la carretera durante 500 metros y seguimos por una pista que sale a mano izquierda.
La pista sube por el monte apenas unos metros para convertirse en sendero, por el que llegamos hasta un collado desde donde se ve la Almenara. Más adelante, el sendero sigue junto a una valla y llega al cortijo de Miguel Serrano (ruinas).
En el cortijo giramos a la derecha, para bajar a la depresión por la que continua el sendero. Éste se encajona por un barranco por el que seguimos hasta que la ruta se desvía hacia la derecha. Sin embargo, es fácil pasarse dicho desvío (como a mi me pasó) y llegar hasta una fuente seca (al menos en verano). Desde la fuente debemos girar a la derecha y subir campo a través hasta la pista de tierra de las Espineras. Seguimos la pista por la izquierda hasta un collado con un cartel que nos avisa del comienzo de la subida al pico. Muy cerca está la fuente del Pino de los Muchachos. El resto de la ruta es subir por el sendero zigzagueante que llega a la cima, con vistas al noroeste de la llanura de La Mancha y al sureste del Calar del Mundo.
Regreso por la misma ruta.