El Pico Aneto (3404 metros) es el techo de los Pirineos. Está en la zona axial pirenaica, levantada durante la orogénesis alpina. Posteriormente, los glaciares cuaternarios excavaron profundos valles en cuyos fondos se conservan numerosos lagos o ibones. Como resto de este glaciarismo todavía persiste el glaciar del Aneto.
Para llegar al inicio de la ruta, salimos de Benasque por la carretera A-139 en dirección norte y dejamos a mano derecha los desvíos de Cerler, Senarta y Baños de Benasque. A los 10 kilómetros encontramos el desvío que conduce hacia el Hospital del Benasque, antiguo hospital de peregrinos y actual restaurante. El coche se puede dejar en un aparcamiento que hay antes de la barrera que da entrada al parque.
En verano, el acceso a la Besurta se realiza en autobús, que se puede coger en Benasque o en el mismo aparcamiento de los Llanos del Hospital. En invierno, la carretera de la Besurta es una pista de esquí de fondo, así que hay que acceder desde los Llanos del Hospital.
Por la pista asfaltada (o pista de esquí de fondo en invierno), no tiene pérdida.
Desde La Besurta (1890 metros), al fondo del valle del Hospital de Benasque, sale un sendero de pendiente suave con marcas amarillas y blancas que nos lleva al refugio de la Renclusa (2140 metros) en unos 30 - 40 minutos. Antes de llegar al refugio veremos el desvío que conduce hacia Aigualluts.
Por sendero, con numerosos hitos de piedra. Hay dos posibilidades. La primera es subir hasta el Portillón inferior, y seguir cerca de la cresta hasta el Portillón superior. La segunda es subir por el sendero hacia la Maladeta, desviándonos a la izquierda a cota 2800. Desde el Portillón tenemos una primera vista del glaciar del Aneto. En invierno la ruta es muy similar aunque con esquís resulta más cómodo subir en dirección a la Maladeta y desviarse después hacia el Portillón superior.
Bajamos del Portillón (una zona delicada en invierno) y un poco más adelante comienza la travesía del glaciar. Lo más habitual es seguir la huella de la gente que habrá pasado antes que nosotros. Una vez cruzado el glaciar alcanzamos el collado de Coronas, entre la Tuca de Coronas y el Aneto. Solo nos queda la ascensión final al Aneto, al que subimos por su cara noreste, llegando al paso de Mahoma. El paso es una estrecha arista con caída importante por ambos lados en el que, los días de máxima afluencia, suele ser habitual tener que hacer cola. Es un paso bastante aéreo no apto para personas con vértigo. Al otro lado está la cima (3404 metros), con una buena vista del glaciar de Coronas (oeste) y de la zona sur del macizo.
Se accede a ellos desde el glaciar, subiendo por el collado del Medio. Desde el collado es bastante fácil acceder a estos dos picos. El Pico de Coronas queda a la derecha, y tiene unas vistas impresionantes del Aneto y el corredor Estasen. El Pico del Medio queda a la izquierda, por una cresta de roca algo descompuesta.
Por el mismo camino que en la subida; suele ser la ruta más habitual de regreso. Son unas 3 horas hasta la Besurta y una más hasta el Hospital.
Bajando por el glaciar llegamos al Vall de Barrancs y al Plan de Aigualluts. Por el fondo del valle volvemos a la Besurta.