El barranc de l'Infern está en la comarca de la Marina Alta, entre Vall de Ebo y Vall de Laguart. Se trata de un barranco encajonado con tramos de impresionantes cortados que forma el río Girona entre las sierras de la Carrasca y del Migdia.
Piensa más en la distancia, desnivel y tu condición física cuando prepares las rutas.
Empezamos la ruta en Ebo, pueblo al que llegamos desde Pego por la CV-712. Tras cruzar el puente sobre el río Girona y antes de entrar al pueblo veremos a mano izquierda la pista por la que comienza la ruta, con un poste de señalización y un panel de información con las rutas que se pueden hacer en la zona.
Salimos de Vall de Ebo hacia el este y vemos en seguida el primer poste de ruta. Vamos a seguir el PR-CV 58 en dirección a Tormos. La ruta discurre por una pista que pasa por la depuradora y después se bifurca. Continuamos por la izquierda, y cuando se acaba la pista cruzamos el cauce seco del río Girona. Al otro lado del cauce hay un corral que bordeamos y comenzamos la subida por el sendero. La ruta cruza la carretera CV-712 antes de llegar a una pista. Por la izquierda se va al refugio de la Figuereta y por la derecha a Tormos. Estamos cerca del Avenc Ample, al que nos podemos acercar aunque solo sea para ver su entrada.
Bajamos por la pista a la carretera, giramos a la izquierda y caminamos algo menos de 300 hasta encontrar la pista de les Juvees, a mano derecha. La pista no tiene pérdida y nos conduce al corral de la Carrasca, donde se desvía el PR-CV 58. Seguimos por la pista (PR-CV 43) hasta les Juvees d'Enmig, donde nos encontramos con un poste del PR-CV 147. Vamos a seguir ahora esta ruta bajando al barranc de l'Infern y a mitad de bajada nos encontramos con la font de Reinós, un buen sitio para hacer una breve parada.
Desde la font de Reinós bajamos al barranco. Por el otro lado del barranco sube el PR-CV 147 hacia les Juvees de Dalt, pero nosotros vamos a remontar el cauce de regreso a Vall de Ebo. El cauce es incómodo para caminar y se deben utilizar las manos a menudo para progresar por este caos de bloques, pero no se necesita material de escalada para progresar en dirección a Vall de Ebo.
Pasamos por zonas estrechas con fresnedas bien conservadas antes de salir del barranco por la pista de la Font de Gili, cuya agua no es potable. Desde la fuente, seguimos la pista de regreso al pueblo.
