El Mulhacén (3479 metros) es el techo de la Península Ibérica. Su pared norte, una de las más grandes de Sierra Nevada, presenta una buena colección de vías invernales. Algunas de estas vías son muy repetidas como la directa del corredor central.
Comenzamos la ruta en el Albergue Universitario. Desde Granada subimos a Pradollano por la A-395. Antes de llegar a la estación, veremos el desvío a mano izquierda por el que se sube hacia la zona de los albergues. El coche se puede dejar en los aparcamientos que hay cerca del Albergue Universitario.
Desde el albergue, subimos por la pista que conduce al Veleta. Pasamos junto al albergue militar, la cadena que cierra la pista, el observatorio astronómico y el monumento de la Virgen de las Nieves. Delante de nosotros se ve el inconfundible perfil recortado del Veleta. La ruta prosigue por la pista hasta que empezamos a atajar, siguiendo la huella marcada en la nieve de otros montañeros. Subimos hasta las posiciones y atajamos directamente hacia el refugio de la Carihuela, atravesando varias de las pistas de esquí que bajan del Veleta.
Desde el refugio, en vez de seguir por la pista, continuamos por la ruta del paso de los Guías. El paso, bastante aéreo, está equipado con una cadena. Una vez bajado el paso, volvemos a salir a la pista, por la que seguimos hasta pasar las lagunas de Río Seco. Nos desviamos de la pista para subir por la cara oeste de la Punta de Loma Pelada y ahorrarnos la vuelta por Villa Vientos. La subida es corta, y después de una empinada bajada, rodeamos la laguna de la Caldera y llegamos al refugio. Las últimas luces de la tarde tiñen de naranja la loma del Mulhacén.
Desde el refugio subimos al collado del Ciervo y bajamos hacia la hoya del Mulhacén, pero sin llegar a la laguna de la Mosca. En vez de eso, nos pegamos a los neveros que hay al pie de la norte y flanqueamos hasta la entrada del corredor. Aunque no hay mucha nieve, ésta está en buenas condiciones y parece que no vamos a necesitar la cuerda. Subimos poco a poco por el corredor central, por pendientes de 45-50 grados. En el tramo alto del corredor decidimos continuar por la Lorente-Monleón, por la que salimos a la izquierda de la cima.
Tras pasar una media hora en la cima, bajamos por la ruta normal de la cara oeste hasta el refugio de la Caldera.
Regresamos por la ruta normal a la Carihuela y bajamos a los albergues.